Más del 40% de los niños colombianos han sufrido maltrato físico, psicológico o sexual

El Ministerio de Salud presentó este lunes la primera encuesta de violencia contra menores de edad en el país. Los resultados reafirman la necesidad de tomar medidas concretas para reducir el impacto que tiene a largo plazo en su proyecto de vida.

Más del 40% de los niños colombianos han sufrido maltrato físico, psicológico o sexual  Más del 40% de los niños colombianos han sufrido maltrato físico, psicológico o sexual Foto: Pixabay

En la última década la violencia contra niños, niñas y adolescentes ha aumentado en distintas latitudes y Colombia no es la excepción. Según la primera Encuesta de Violencia contra Niños, Niñas y Adolescentes (EVCNNA), presentada este lunes por el Ministerio de Salud, al menos el 41 por ciento de los menores en el país ha sufrido algún tipo de maltrato físico, psicológico o sexual. 

Los principales conclusiones arrojaron que la violencia física antes de los 18 años afecta más a los hombres (37,5%) que a las mujeres (26,5%), mientras que la violencia sicológica por parte de padres, cuidadores, parientes o adultos antes de los 18 años se ejerce más sobre las niñas (21,2% en contraste con 9.5%  los niños). De igual forma, la violencia sexual en contra de las mujeres prevalece en todas sus formas en comparación con la de los hombres.

El estudio evaluó a 5.218 personas de 26.526 hogares de todo el territorio nacional y se enfocó en aquellos que entre los 18 y 24 años recuerdan haber tenido problemas de violencia. Según explicó el viceministro de Salud, Iván Darío González Ortiz, durante la presentación, la  muestra se organizó en dos grupos: el primero con 94 de los 1.122 municipios del país y el segundo, con 49 municipios de 170 priorizados por estar expuestos al conflicto armado.

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Esta es la primera vez en la historia que en Colombia se realiza una encuesta de este tipo y según Ortíz, aunque las cifras ratifican que Colombia tiene grandes desafíos por superar en este tema, la consolidación de los datos es un gran paso para afianzar las estrategias contra la violencia en menores.   

“Somos el primer país de suramérica qque adopta esta encuesta y por eso la vemos  con dos miradas: con la responsabilidad que implica entender que alrededor del 40 por ciento de niños sufrieron violencia, pero también con la tranquilidad de tener la información de todo el territorio para avanzar con el compromiso de erradicarla”, afirmó el funcionario de la cartera. 

El Ministerio de Salud no es el primero en prender las alarmas sobre este tema. El más reciente informe del Instituto de Medicina Legal también alertó hace unos meses que todas las formas de violencia contra menores vienen en aumento.  Según su directora  Claudia García, los homicidios, violaciones y maltratos al interior de la familia  en menores de edad ha crecido de manera alarmante. 

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Pero lo realmente preocupante de las cifras es que su impacto en el proyecto de vida está ampliamente comprobado. Psicólogos, neurólogos y educadores han demostrado que ejercer cualquier tipo de violencia durante la infancia desencadena una serie de traumas o actitudes perjudiciales para el desarrollo en la adultez de un niño.

Está comprobado, por ejemplo, que los niños que reciben cuidados inadecuados, especialmente durante el primer año de vida y generalmente de madres que a su vez fueron abandonadas o maltratadas, son más sensibles a los efectos del estrés y muestran más problemas de comportamiento que los niños que reciben cuidados adecuados. Además,  los estudios documentan, el incremento en patrones negativos del comportamiento incluyendo la deserción escolar, el abuso de estupefacientes, la depresión, el suicidio, la futura victimización o su vinculación con la violencia y la delincuencia 

Pero estos hechos no se pueden analizar de forma aislada.  La pobreza y los conflictos potencian los riesgos que tienen los niños de sufrir violencia: asesinatos, violaciones, abusos, mutilaciones genitales, trabajos forzosos, maltrato o reclutamiento en conflictos. Temas en los que Colombia también debe trabajar si quiere enfrentar de raíz el problema del maltrato infantil en su territorio.